Tercera película de Bigas Luna, posterior a la aclamado Bilbao, de 1979.
Nos cuenta la historia de dos hermanos Bernardo (Ángel Jove) y Eloisa (Consol Tura), unos burgueses que viven en horas bajas en una casona algo destartalada y de forma precaria en compañía de Dany, su caniche. Pasan los días con pequeñas obsesiones y de una forma claustrofóbica, esperando a que su adinerada tía se muera y puedan disfrutar de su herencia. Tras el fallecimiento de su tía, su posición cambiará… pero no sus obsesiones.
Película perteneciente al «tríptico negro» de Digas Luna —Bilbao (1978), Caniche (1979) y Angustia (1987)–, en la que se tratan temas como la zoofilia o el incesto, dichos elementos solo serán una excusa para hablar de las obsesiones humanas y la soledad.
